Rollo N°

DIVINO ORIGEN DE LAS DIVINAS BALANZAS SOLARES; CÓMO SUCEDIÓ EL PRINCIPIO DEL PENSAR HUMANO; LA CAUSA DE SU PROPIA FORMA; FORMA QUE TENDRÁ EN EL FUTURO.-

Sí hijito; te explicaré el divino origen de toda justicia; la divina justicia nace en el mismo instante en que son creados los planetas y soles; cuando los soles están creando las futuras chispitas de los futuros planetas, ya está en ella la justicia; todo está en invisible germen; allí están todos los destinos que la habitarán; es decir, que existe ajetreo en lo invisible y lo visible; lo invisible es materia; otras criaturas pululan en la dimensión de lo invisible; ellas viven como vosotros vivís en lo visible; lo de arriba es igual a lo de abajo; estas criaturas también sienten atracción novedosa hacia lo visible; tal como la sentís vosotros; la diferencia entre ustedes y ellas, es la misma diferencia que existe en la Tierra; que siendo diferentes por muchas cosas, sois seres humanos; sois de una misma carne; igual ocurre en lo invisible; estas criaturas están cerca de vosotros; y pasan también pruebas; tienen infinitas leyes que cumplir; dentro de su propio mundo; ellas también poseen cuerpo de carne; pero su carne no es la misma carne humana; la carne de estos seres es expansiva, y brillan; es el conocimiento hecho carne; poseen y lo sienten, sus propias eternidades; tienen recuerdo de todas sus existencias pasadas; y sacan conclusiones de ello, saben que viven la vida eterna; saben que pueden ser llamados en cualquier instante; para aprender una nueva forma de vida en algún remoto planeta; muchos piden volver a la vida de los mundos; otros prefieren quedarse; poseen en otras palabras, lo que vosotros poseéis; tienen libre albedrío; y hacen también, divinos planes de progreso; estas criaturas saben porque lo ven, que el universo es infinito; saben que todo mandato viene del divino Padre Eterno; saben en infinitos grados, lo que ocurre en lejanos y colosales soles; ellas ven escenas divinas; que vosotros no veis; pues pedisteis una vida con cierto olvido de vuestro origen; y os fue concedido; y multitudes de estas criaturas, pedirán eternidades más adelante, la prueba de la vida humana; pedirán lo que vosotros pedisteis; pedirán conocer un planeta llamado Tierra; pedirán nuevas experiencias; pues sienten un deseo irresistible de tener mayor conocimiento; saben que solo la ilustración, los hace llegar donde mora el divino Padre; saben que para ser grandes como los soles, deben aprender más; deben volver a nacer de nuevo a la vida; reciben toda clase de ayuda divina para lograr lo que desean; entre el infinito conocimiento que reciben, está la divina justicia; están las divinas balanzas solares; conocidas en todo el universo.-

Sí hijito; las divinas balanzas tienen todas las formas imaginables; cada espíritu es su propio constructor; cada uno se hace su propio cielo; el conocimiento adquirido en la vida de los planetas, se materializa en el reino de los cielos; éste adquiere la forma de la misma individualidad que tuvo o tiene el espíritu; es allí donde la individualidad reconoce a la individualidad; es allí donde se levanta el velo del pasado espiritual; es allí donde los espíritus de todos los mundos, reconocen el lugar de donde salieron; es allí donde todos sin excepción alguna, recuerdan con lástima y hasta con vergüenza, las modas y costumbres de un lejano planeta; y ven que estuvieron en un puntito flotando en el espacio; ese puntito se llamaba planeta Tierra; y solo tienen el recuerdo de él; y solo les queda en la mente, no volver más a él; las ingratitudes y la explotación humana, hacen que el lejano planeta sea mirado, como un planeta-infierno de cierta categoría; y esta impresión se debe a un grupo de ambiciosos, que creó una injusta filosofía llamada riqueza; producto de sus propias ambiciones; las ansias de dominar a los demás; ignorando incluso mis divinos mandamientos; y ten la seguridad hijito, que si en la Tierra no hubiesen nacido estos demonios, la Tierra sería un paraíso; no estaría dividida la humanidad en ricos y pobres; sería un mundo, con gobierno patriarcal; un solo gobierno universal; un gobierno con leyes comunes; al ambicioso no le agrada la ley común; aunque sepa que es la más justa; tal como la divina vara; que es común a todos; la divina vara es justicia viviente; cada espíritu sin excepción alguna, la vio y la conoció en el reino de los cielos; alternó con ella; y prometió someterse a ella; como parte de su propia evolución; negar la divina vara, es negar su propia eternidad; estando Dios en todas partes como se enseñó, está también en la divina vara; como está en toda doctrina viviente; por el fruto se conoce el árbol; quiere decir que toda doctrina salida directamente del libre albedrío del Creador, supera todas las demás; todos los pensadores que han creado doctrinas, las han pedido en el reino de los cielos, y se les concedió; como se concede todo destino de vida; son espíritus venidos desde infinitas galaxias; que han avanzado en filosofías; y piden probarlas en planetas de pruebas como lo es la Tierra; y en medio del pensar humano, el divino Padre coloca su propia revelación; la coloca silenciosamente; valiéndose de los hijos humildes; que son primeramente probados por el divino Padre, para saber si tal espíritu es de Dios; si no tiene otros señores; pues el divino Padre a nadie obliga; los hijos escogidos pasan pruebas espirituales, que no las pasa el resto de los espíritus; y si el resto pasa ciertas pruebas, su causa es otra; hay pruebas propias del espíritu; que son deudas pendientes del pasado; como también pueden ser premios; de todo hay en el rebaño del Señor; las otras pruebas espirituales, son impuestas por el divino Padre, a todo hijo que tiene una determinada misión; ¿No pasaste tú, hijito, pruebas espirituales? Así es divino Padre; por tu gracia divina, las pasé y gané una inmensa experiencia; supe en la medida que Tú lo quisiste, qué es lo que ocurre en lejanas galaxias; Sí hijito; todo cuesta en la vida; hasta mi divino hijo primogénito, dio su vida en su divina misión; dio el ejemplo a todo revolucionario; porque dentro de los mismos revolucionarios, ninguno es superior a un padre solar; esto es hablando en jerarquía espiritual; existen muchas causas por las que se lucha; mas, la suprema de todas, es aquella que defiende los mandatos del Creador del universo; pues de Él, salieron los pensadores y los revolucionarios; todos son esencias microscópicas salidas del Padre; lo que el divino Padre tiene en infinito, los hijos lo poseen en grado microscópico; la divina vara actúa en todo el universo; hasta Satanás es juzgado por ella; nadie está fuera de ella; pues donde exista un productor de ideas, allí está la divina vara; en lo más recóndito de la idea; pues siendo el universo viviente y expansivo, también lo es su divina vara; la divina vara está, por lo tanto, en la materia y el espíritu; está arriba como abajo; está en el macrocosmos y en el microcosmos; está en todos los elementos de la materia; está en su más microscópica forma, que es la idea; la común idea que a diario crea vuestra mente; y que tan poca importancia habéis dado en la vida; escrito fue que todo humilde y todo olvidado serán los primeros; está divina parábola, empieza por vuestras propias ideas; preguntaos ¿Existe en vosotros algo más microscópico que no sean vuestras propias ideas? Ciertamente no existe en vosotros algo más microscópico que vuestras ideas; nunca en la vida, os fue dado verlas; cuando viajan al espacio, y son recogidas por las divinas naves plateadas que vosotros llamáis platillos voladores; y tened la seguridad, que todas vuestras ideas, son juzgadas; son pesadas por las divinas balanzas solares; y medidas por la divina vara; todas sin excepción alguna; desde las que creasteis, de las que estáis creando y de las que crearéis; solo no son juzgadas sino, que son destinadas; es decir, se forman con ellas espíritus, planetas y soles; pues materia y espíritu son una misma esencia en la creación viviente del Eterno Padre; siendo una misma esencia, se manifiestan en diferentes formas; conservando sus libres albedríos vivientes; esto significa que la vida es una forma geométrica y relativa al instante y tiempo en que vive; el instante es el mandato; el tiempo, la duración de vida en el divino mandato; cada vida es un cambio en el mismo espíritu; y cada cambio le empuja a conocer nueva materia; nueva filosofía; nuevo destino; una relatividad más; una forma de criatura más; es así, que la actual forma humana, es producto de su propio pasado; de sus pasados pensares; es el libre albedrío guiando al libre albedrío; para llegar a una determinada forma, hay que previamente moldear la futura forma; la forma se toma de vuestro propio conocimiento; de vuestras propias ideas; es por eso que fue escrito: Cada uno se hace su propio cielo; según la responsabilidad que se tuvo en la vida, así será la forma futura de vuestra existencia; no hay existencia sin que no tenga responsabilidad; mis divinos mandamientos, os fueron dados, para que en vuestras vidas, surgieran ideas sanas; amorosas y humildes; porque de ellas nacen vuestros propios paraísos; de las ideas malas, los futuros infiernos; las ideas os esperan en el reino de los cielos; pues siendo ellas microscópicas y humildes, son grandes en la morada del divino Padre; y todas son jerarquías solares; que esperan en un sueño viviente, nuevo destino; sueño viviente significa que todo sueño es una vida en actividad, en otras dimensiones; en microscópicos microcosmos; se sueña y a la vez se vive; es un sueño celestial; en que un segundo de tiempo celestial, equivale a un siglo terrenal; allí todo es angelical; nada perturba la inocencia de las ideas vivientes; incluso son ajenas a la influencia mental; de las criaturas que las crearon; allí todo es alegría eterna; todo emana amor; no existen los pesares; es la eternidad hecha dulzura; de estos universos de ideas vivientes, el divino Padre Jehova, escoge las divinas alianzas; de las que serán las futuras virtudes; que acompañarán al espíritu-sol en una nueva existencia; es como un imán, que se atrae a pequeños imanes; una comparación material; para el entendimiento humano; que solo comprende escasamente su microscópico presente; estas divinas alianzas son las que dan lugar, a la formación de nuevas criaturas; conocidas como nacimientos; dar a luz; reencarnaciones; todas explican lo mismo; una ley se puede dar a conocer de muchas formas; y no por eso deja de ser la misma ley; por lo tanto, la sucesión de existencias, es ley de vuestro propio progreso; es haber vivido otros sudores de frente en otros mundos; es vuestro propio mérito; por las existencias del pasado, sois ahora seres humanos; y sin las existencias que tuvisteis, nada seríais; seríais la ignorancia en su máxima expresión; mi divina palabra también lo dice: Hay que nacer de nuevo, para ver el reino de Dios; es lo mismo que decir: Hay que reencarnar de nuevo; hay que entrar en nuevos cuerpos de carne; salidos de vuestras anteriores envolturas; de vuestros anteriores conocimientos; de vuestros anteriores esfuerzos de perfección; de vuestras anteriores experiencias; así como en la Tierra la ciencia humana busca nuevos inventos, así también el divino Padre perfecciona a sus espíritus; lo de arriba es igual a lo de abajo; mas, todo salió del Padre; la individualidad la moldeáis vosotros; mas, vosotros salisteis del divino Padre, os creé y os di libre albedrío; sois hijos del eterno fuego; y retornáis al fuego; como retorna toda presencia viviente suspendida en todos los espacios, cielos, galaxias, universos, planetas; pues todo es salido del fuego; un divino fuego que todo lo materializa; y existe en él, la más infinita variedad; una variedad que da nacimiento a otras; en una cantidad tal, como vuestra mente pueda imaginar; vosotros en medio de este infinito, estáis recién aprendiendo del universo; sois como los bebés; que habiendo nacido, aún no comprenden el ambiente que les rodea; solo tienen intuición de ello; y todo el infinito que aún no comprendéis, fue igual que vosotros; fue microscópico; y lo fue cuando aún no estaban los actuales universos; la sucesión de los universos, nadie la puede calcular; ni aun naciendo de nuevo en cantidades infinitas; solo el divino Padre lo sabe; como sabe todo el futuro universal; han habido por lo tanto, infinitas divinas varas; pues habiendo imperfección, tiene que haber una medida de justicia; toda justicia es un conocimiento superior; es una filosofía de la convivencia; se necesita vivir sin atropellos; mas, la justicia terrestre carece de honradez; pues no juzga guiándose por mis divinos mandamientos; juzga por intereses pasajeros; y te asuro hijito, que ningún falso juez, llevará en su pecho el corderito de plata; porque serán juzgados con la mayor severidad; ningún falso juez entra en el reino de los cielos; están en la misma ley de los llamados ricos; ¡Jueces de la Tierra! ¡Cómo maldeciréis el dinero! Pues por comerciar la justicia, seréis condenados; en el reino de los cielos, pedisteis la filosofía de la justicia material; y os fue concedido; se os hizo ver, la enorme responsabilidad que os poníais entre las manos; prometisteis dar protección al humilde; el divino Cordero de Dios os despidió; antes de venir vosotros al mundo; a Él prometisteis aplicar una amorosa justicia; pero escrito estaba que no se puede servir a dos señores; o se sirve a la justicia desinteresadamente, o se sirve a la justicia corrompida; en vuestros libres albedríos, quedó grabado por toda la eternidad, el camino que tomasteis; nadie os obligó; y os diré que son contados con los dedos, los jueces que son salvos; escrito fue que los humildes son los primeros; que ellos debieron tener lo mejor; y la más justa justicia; pero veo que habéis hecho lo contrario; habéis favorecido al rico; al que de antemano estaba condenado en la justicia divina; habéis sido riguroso para con el pobre; no lo defendisteis contra estos demonios; abandonasteis a mis elegidos; Divino Padre amoroso, ¿qué justicia tiene un falso juez terrestre? Te lo diré hijito: Deberán pagar cada segundo de tiempo, que duró una injusta condena; por cada hijo que injustamente fue víctima de un demonio injusto; más, los reclamos de cada porito de carne; de los cuerpos que en las cárceles fueron mutilados; todo hijo pide también pruebas en la vida; pruebas, dentro de la prueba de la vida; cada tragedia que ha ocurrido y aún ocurren en el mundo, fueron pedidos por los espíritus en el reino de los cielos; siendo las deudas infinitas; son también por sus características, infinitas; y las formas de pagar las deudas, también lo son; los pedidos de ajusticiamiento antes de venir a los mundos, son infinitos; y todo se concede; todos quieren levantarse después de una caída; todos ven la gloria eterna después de cada existencia; después de unos instantes de ausencia de la eternidad; la enorme variedad de destinos, se debe únicamente a esta causa; y todos tienen olvido de su pasado; este eterno vivir en que la criatura cae y se levanta, es proporcional al avance de cada uno; más todos, quieren probar todo; pues mientras más se sabe, mayor se es en el reino de los cielos; mayor es la jerarquía espiritual; mayor poder se tiene en la creación; y más se acercan los hijos, a su divino Creador; no existe otro camino que no sea la sabiduría, para acortar el camino; el ejemplo supremo el mundo lo conoció; lo conoció en mi divino hijo primogénito; él tenía poder sobre toda la naturaleza; daba vida; resucitaba a los muertos; era grande y poderoso en ley de creación; rehacía lo que había sido destruido; ejemplo mayor de poder, no ha conocido el mundo; ni conocerá; que no provenga del divino primogénito; por algo es primero; mas, él no dio importancia a su propio poder; porque era humilde; para él tuvo importancia la palabra viviente; la ley; la doctrina; que ha perdurado a través de los siglos; su divina doctrina, también fue prometida en el reino de los cielos; la diferencia, es diferencia de mérito; él pertenece a la trinidad solar; él fue lo que ustedes recién serán; él fue primero después del divino Padre; es lo que se llamaría, el sucesor del Eterno; mas, nunca habló de sí mismo; era sencillo y amoroso; sabía que los monitos humanos, tendrían que recorrer, lo que él ya recorrió eternidades atrás; cuando aún no nacían los mundos de la carne; y no estaban los actuales soles del espacio; su ley no era ley de este mundo; pues su evolución era otra; de donde yo soy, ustedes no pueden ir, dijo él; y ciertamente tendréis que nacer de nuevo, en grado infinito; y aún no le alcanzaréis; no obstante que su divina trinidad está en vosotros mismos; está en vuestras ideas; tal como lo está el Padre; pues leía toda mente viviente; es decir, que también el divino primogénito está en todas partes; lo que posee el Padre, lo posee el hijo; forman la comunidad solar; el comunismo en la trinidad; el mismo comunismo que ha brotado en el germen de los monitos humanos; una herencia adormecida; una filosofía en germen; con fuerza expansiva; una revelación que esperaba su tiempo; como todas las demás filosofías; el comunismo es y será la doctrina final en todos los mundos; es la misma filosofía que reina en la morada del Padre; todos los espíritus nacen comunistas por divina herencia; en sus primeras fases de sus nacimientos, que es la inocencia, los espíritus no conocen filosofía alguna; para ellos el universo es la morada común; más adelante todo espíritu pide conocer la vida; la vida en los infinitos planetas; pide ser como los soles; pide conocer filosofías vivientes; y pide nacer de nuevo; sabiendo con anticipación que las filosofías que pide en su libre albedrío espiritual, son cortas; efímeras; y eternamente relativas; toda filosofía es probada; y es juzgada; toda filosofía es un pedido hecho al divino Padre; y todo se concede; aun sabiendo el divino Padre, de las futuras caídas y desvíos que tendrá el espíritu; hasta el error es experiencia; también es probado; también lo pide el espíritu; pues lo desconoce; está recién empezando el camino de la perfección; y todo empezar empieza por el error; de la inseguridad se pasa a la seguridad; de la incertidumbre a la certidumbre; de la desconfianza a la confianza; del desengaño a la sorpresa agradable; de la tiniebla a la luz; todo cuanto os suceda y sucederá, vosotros mismos lo pedisteis en el reino de los cielos; nadie está obligado a venir contra su voluntad a la vida; así como en la Tierra a nadie se puede obligar a ciertos deseos; igual ocurre en el reino de los cielos; lo de arriba es igual a lo de abajo; y es así hijito, que a todos esos hijos que quise vieran tus escritos, lo hice con la divina intención de que fueran los primeros; ellos lo pidieron así en el reino de los cielos; y el divino Padre vio que había mérito para ello; mas, sabía que en la Tierra me iban a despreciar; y aun así, les fue concedido; es por eso hijito que te ordené amorosamente, que fueras donde ellos; las innumerables cartas que te hice escribir, no tenían otro objeto; las visitas que hiciste a muchos hogares e instituciones, igual; tenía por objeto hacer cumplir lo que estaba escrito en el reino de los cielos; mas, todos los que pidieron ser los primeros, me rechazaron; a pesar que les dijiste que tenías la telepatía permanente; ninguno se tomó el trabajo de estudiar la nueva revelación; fueron cómodos; juzgados serán; pues sabían en sus culturas, que primero está Dios por sobre todas las cosas; distinta sería la ley, si hubiesen sido ignorantes; ¿A qué se debe este desprecio divino Padre? Sabia pregunta hijito este desprecio hijito, se debe a la ilusión que tiene el espíritu sobre la vida que acostumbró llevar; es una ilusión que desemboca en la incredulidad; pues es producto de herencias demoníacas; es decir, formas de vivir, sin tomar en cuenta mis divinos mandamientos; estos hijos que muy pronto llorarán, fueron influenciados por el materialismo; por la roca del egoísmo humano; y por la ignorancia de sus padres; estas causas se han extendido por toda la Tierra; pues no habrá quien no se lamente y llore por causa de ellas; y no habrá quien no las maldiga desde el fondo de sus corazones; pues por causa de ellas, millones y millones de mis hijos, no entrarán al reino de los cielos; esta ilusión que pierde a los hijos, puesto que los aleja de la humildad, ya había sido enseñada al mundo; antes que éste hubiera nacido; escrito está, en los libros solares, que el divino Padre dijo a la primera pareja humana: De todos los árboles y sus frutos comeréis; mas, no comeréis del árbol de la ciencia del bien; quise decir para las futuras generaciones: No os alimentéis de filosofías pasajeras; ilusorias; efímeras; que ellas también son probadas; en mi divino libre albedrío, las filosofías las mencionó como árboles; árboles galácticos; cuyas semillas son los mundos mismos; entre esos árboles, está el dinero; el que otorga bienes; el que compra las conciencias; el que corrompe; el que hace que mis hijos se peleen como lo hacen las fieras; Adán y Eva poco sabían de este árbol podrido; es por eso que fueron advertidos; y fueron probados en obediencia; así ellos lo pidieron en el reino de los cielos; y les fue concedido; fueron leyes propias para ángeles que comenzaban a probar filosofías planetarias, cuyo número se confunde con el infinito mismo; pues no fue ni será la primera caída; vendrán infinitas más; como las innumerables caídas que a diario ocurre en los espíritus humanos; lo de arriba es igual a lo de abajo.-

Alfa y Omega.-