DIVINO ORIGEN DEL DIVINO PADRE JEHOVA; SU DIVINA Y ETERNA CREACIÓN; LA DIVINA BOLA DE FUEGO DEPURADOR; EL DIVINO PADRE Y LA SUCESIÓN ETERNA DE LOS NÚMEROS; EL NÚMERO 318 DE LA DIVINA JUSTICIA.-

Sí hijito; este dibujo celeste es lo que más se aproxima a mi divino libre albedrío; pues existiendo la relatividad, tanto en la materia como en el espíritu, mi divino libre albedrío está en ellas; pues estoy en todas partes; Soy infinitamente expansible y a la vez contractible; estoy en todas partes y en lo más microscópico; en la evolución humana lo más microscópico, son sus propias ideas; éstas se dejan sentir pero no se dejan ver; estoy también en ellas; estoy en la misma relatividad de ellas; y estoy en sus libres albedríos; estoy en las 318 virtudes vivientes del espíritu humano; estoy arriba y abajo; estoy en la materia y en el espíritu; estoy en la vida y en la muerte; estoy en el todo sobre el todo; estoy en lo pensado y lo impensado; en lo imaginado y lo inimaginado; mi divina esencia es divino fuego; un fuego del que ha salido todo el universo; el universo es una microscópica variación de mi divino fuego; todos tenéis mi divina herencia; todos poseéis temperatura; poseéis electricidad en vuestros cuerpos; las criaturas y los planetas; nada hay que no tenga indicios de fuego; los soles y los microbios; todo el universo expansivo pensante; y así será por toda eternidad; la eternidad viviente también es fuego; que posee vibraciones inauditas para el entendimiento humano; el fuego posee también jerarquía; grados de pureza; tal como las individualidades que también son de fuego; y todo espíritu brilla como el fuego de un rubí; brilla como un microscópico sol; todos son eléctricos; siendo la carne la envoltura exterior de la fuente radiante; la carne es también fuego; es producto abstracto y viviente del fuego solar; al decir abstracto quiero decir pasajero; pues la carne acompaña al espíritu solo para el viaje a la vida; es una alianza, en que marchan juntos a ganar experiencias a la vida de los planetas; ambos lo hacen con conocimiento de causa; ambos prometen en el reino de los cielos, cumplir con los divinos mandamientos; ambos pertenecen al universo viviente; ambos prueban una de las infinitas formas de vida que hay en el universo; cuyo número jamás podrán calcularlo las criaturas; solo el Padre Eterno lo sabe; la materia que rodea al hombre, no es ni será la única; cada mundo formado es de materia diferente; su sal es otra; sal significa la salida que tuvo de tal o cual filosofía solar; ida significa espiritualidad en viaje galáctico; el cuerpo humano vuelve a ser lo que antes había sido; esencia magnética del mismo universo; el magnetismo es la materia misma; ambas son del fuego eterno; la vida humana siente dolor y alegría; ambas también son magnetismo; y lo son todas sus virtudes; son fuerzas de la naturaleza; encerradas momentáneamente en un cuerpo; dejado el cuerpo, todas las virtudes buscan su propio infinito; de donde eran; antes de haberse unido al espíritu; así como los soles se unen a los mundos, así también las virtudes se unen a un espíritu; lo de arriba es igual a lo de abajo; los espíritus son microscópicos soles; poseen brillo en su proporción relativa; son conocidos en el reino de los cielos, como espíritus-soles; soles que están empezando; son aún tan microscópicos, que ni sus dueños ven su propio brillo; el espíritu humano se forma según sus propias intenciones; si no avanza según los mandamientos, queda como espíritu atrasado; con respecto al tiempo que vive en el universo; tiempo viviente que empezó en los mismos soles; pues de allí salió; salió de un fuego mayor; y volverá a ser él también, un brillante sol de sabiduría; volverá a ser la misma herencia que le fue dada; esto enseña que todo el universo es una infinita jerarquía; y todo se mide con el conocimiento alcanzado por cada uno; esta infinita jerarquía, es tan infinita, que no todos se conocen; se acaba un mundo con una ciencia maravillosa, y ese mundo desaparece del espacio sin ser conocido por el resto; y son mundos colosales; que por sus tamaños llenarían de pavor a la criatura humana; pues una molécula de esos mundos, es infinitamente más grande que la Tierra; así igual la Tierra que habitáis, es desconocida del infinito; y más aún: No os dan ni la mínima importancia; estas criaturas saben que sois un planeta-polvo; tal como ellos lo fueron; muchos soles antes; fueron chiquititos y humildes, para llegar a ser grandes en el reino de los cielos; es la llamada indiferencia galáctica; donde se confunden las más abismantes criaturas y filosofías vivientes; donde lo imposible existe en grado infinito; son mundos que tienen los cielos abiertos; y se comunican entre ellos; tal como era al principio la Tierra; tal como fue en el paraíso que conocieron Adán y Eva; la primera pareja humana; allí llegaban las naves plateadas; las que vosotros llamáis platillos voladores; en estos mundos, poseen otros conceptos más evolucionados; ellos dejaron de ser criaturas de carne, hace ya muchos soles atrás; no existe en ellos la ambición; propia de las criaturas de la carne; ni poseen el sentimentalismo; pues ya pasaron por ello; es por eso que comprenden al resto de las criaturas del espacio; son indiferentes y amorosos; no poseen la temperatura humana; no poseen intereses; son comunes en sus leyes; ellos no conocen la muerte; pero pasaron por ella; cuando fueron criaturas de carne; la conocen; y saben que es una transformación que sufren los espíritus; para ellos los espíritus son soles del microcosmo; son soles que en la eternidad futura, serán como ellos; son criaturas que han nacido mayor número de veces que la criatura humana; pues son infinitamente más antiguos; pues la creación del divino Padre no tiene principio ni tiene fin; mas, cada hijo tiene principio y un destino; dentro del principio, que es el Padre, están los principios relativos de mundos y criaturas; todos los principios tratan de alcanzar el principio del Padre; desde el mismo instante en que el divino Padre dijo: Hágase la luz, y la luz fue hecha; fue una de las infinitas veces que lo dijo; siempre pronuncia divinas palabras cuando ordena a las lumbreras solares expandirse y crear; la creación solar es la gran revelación para el mundo; ella explica el origen de todas las cosas; tanto de la materia como del espíritu; explica el origen del universo viviente del divino Padre; es el Alfa y la Omega de todo conocimiento; pues todo lo que se sabe, salió del mismo universo; salió por mandato del reino de los cielos; que a su vez salieron del mismo principio que salió la Tierra y sus criaturas; lo de arriba es igual a lo de abajo; mi divino libre albedrío ha pasado lo que ustedes recién están pasando y lo que pasarán; fui lo que ustedes son y serán; y lo fui en un grado tal, como vuestra propia mente lo pueda imaginar; todo lo que sentís lo sintió el Padre; por algo se enseñó que vuestro Creador es infinito; un infinito que no basta una existencia para comprenderlo; es por eso que fue escrito; hay que nacer de nuevo para ver el reino de Dios; todo número lleva mi divina herencia creadora; no solo el número terrenal; sino que todos los números de todos los mundos; de los que hubieron hay y habrán; todo número es viviente; todo número acompaña a una individualidad-sol; acompaña a una mente; todo número es expansivo; todo número salió del Padre y vuelve al Padre; todo número al unirse a una mente, pide nuevo destino; todo número posee libre albedrío; tal como lo posee el espíritu; todo número escoge libremente su destino numeral; todo número es un microscópico creador de universos numéricos; todo número es filosofía numeral; todo número es creador de espíritus; todo número es materia y espíritu; todo número posee jerarquía numeral; todo número conoce a su creador; todo número posee inocencia solar; todo número posee su corderito de Dios; todo número juzga; todo número posee divina vara; todo número salió de una trinidad numeral; todo número asiste a toda creación viviente en el reino de los cielos; todo número reencarna; todo número posee su juicio final; todo número pasa pruebas en la vida terrenal; todo número tiene sus divinos mandamientos; todo número posee sus sagradas escrituras; todo número es relativo; todo número tiene herencia; todo número dirige un pensar; todo número conoce la formación de la carne; todo número terrenal conoce y distingue el bien y el mal; todo número es parte del todo sobre el todo; todo número está arriba y abajo; todo número posee virtud; todo número humano posee 318 virtudes; todo número participa en juicios finales; todo número posee sentimientos; todo número posee humildad y arrepentimiento; todo número es revolucionario; toda ciencia hace uso de ellos; todo número crea ciencias; todo número es mundano y espiritual; todo número forma galaxias de cálculo; todo número usa la divina vara en sus acciones; todo número posee sensibilidad; todo número participa en el enjuiciamiento de todo espíritu; ellos calcularon los poritos e ideas de un espíritu encarnado; todo número es juez que espera mandatos; todo número posee sus propios reinos de los cielos; posee su propio reinado filosófico; toda virtud también posee su propio reino; el reino de los cielos es infinito; los cielos no tienen límites; ni lo tendrán jamás; el reino de los cielos es el macrocosmo en su máxima expresión; todos los seres mientras piensan, están creando gérmenes de cielos; cada virtud que está dentro del pensar, posee su cielo; cada idea emanada posee su cielo; el divino Padre posee la numeración infinita; esta numeración infinita es solo una microscópica parte de su divino libre albedrío; posee otros infinitos cálculos; que por su eternidad, dejan de ser numerales; son cálculos solares; son cálculos que corresponden a inteligencias desconocidas por el resto del universo; son los divinos corderitos-solares; que poseen el mismo poder del Creador; es la divina trinidad en la trinidad; es la primogenitura en la trinidad del Padre; no hay poder viviente que sobrepase al divino Cordero de Dios; es la misma divina inocencia del divino Padre Jehova; el divino corderito se multiplica en número desconocido para el resto del universo; ni todas las inteligencias juntas podrán calcular la divina vibración en que se desenvuelve el Cordero de Dios; ni jamás ello ocurrirá; la expansión del universo es producto de la herencia del Padre; existe el universo porque Él quiere que exista; Él quiere que todos sean como Él; que conociendo las leyes de evolución por evolución, lleguen a ser como es el Padre: Constructor de colosales mundos; no esos microscópicos mundos; en los cuales sus criaturas están; si no, en mundos cuyos tamaños no cabría uno de ellos, en todo el universo conocido; mundos que de ser visitados por las criaturas humanas, los llenarían de pavor; porque sus habitantes no los verían; y si los vieran, no les harían caso; sería la misma indiferencia que el humano siente por una hormiguita; más aún; esas criaturas podrían ponerles los pies; es decir, podrían pisarlos; y ni se darían ni cuenta que mataron a unas criaturas venidas desde un remotísimo sistema de vida; venidos de un planeta-polvo llamado Tierra; esto ha sucedido y aún sucede; son otras historias planetarias; y se vienen sucediéndose desde antes que naciera vuestro planeta-polvo; los números se suceden igual que los mundos; en el reino de los cielos de los números, existe la filosofía calculadora; una filosofía tan antigua como el universo mismo; su divina herencia está en todos; no hay quien no tenga medidas; todos poseen cálculo numeral; criaturas y mundos; lo de arriba y lo de abajo; el macrocosmo y el microcosmo; lo visible y lo invisible; la luz y las tinieblas; el microbio y los soles; hasta el divino Creador hace uso de cálculos numerales; siendo Él el creador de los mismos, hace divinas alianzas con los números vivientes; no atropella sus libres albedríos; como no le gustaría que le atropellaran el suyo; es por eso que fue escrito: No hagas a otro, lo que a ti no te gustaría que te hicieran; se refiere esta advertencia al libre albedrío de cada uno; los libres albedríos vivientes acusan en el reino de los cielos; acusan cuando han sido atropellados; estando en la morada del divino Padre, les viene todo el recuerdo de sus experiencias; y son los primeros en ser escuchados por el divino Padre; el libre albedrío es la inocencia que prueba una determinada filosofía; antes de salir del reino de los cielos, todo libre albedrío promete respetar a los otros libres albedríos; y todos se prometen mutuo respeto; muchas parábolas tienen por objeto enseñar el libre albedrío; y toda enseñanza de mis Sagradas Escrituras, fueron hechas con una psicología de prueba; que está aún en la misma interpretación de mis mandatos; hay por lo tanto, pruebas en la intelectualidad y pruebas en la vida cotidiana; pruebas en el espíritu y pruebas en la carne; pruebas visibles y pruebas invisibles; todo pensar humano tiene una constante de dificultad; aun en la felicidad terrenal; pues la felicidad también es probada; siendo la falta más común de la felicidad, el poco agradecimiento al Creador de toda felicidad viviente; el olvido al que le dio la felicidad; al que le dio el soplo de vida; al que le dio un destino; de esto se deduce que toda felicidad humana, termina forzosamente en un llorar y crujir de dientes; la felicidad terrenal no da la eternidad; es un premio mundano; del que se debe rendir cuenta; como se rendirá cuenta de cada acto realizado en la vida; pues cada acto de vuestra mente, pidió también ser probados en la vida; nadie es menos ante el Padre; ni el más microscópico acto; todo es viviente en el reino de los cielos; todo es vida; una vida que estáis lejos de comprender; porque se os puso un momentáneo olvido a vuestro pasado; mas, vosotros hacéis que este olvido sea más profundo; por vuestra propia comodidad terrenal; se os dejó unas Sagradas Escrituras y no las profundizáis; son contados los hijos que buscan; el que busca encuentra; dice mi divina palabra; he permitido que las escrituras lleguen hasta vuestros llamados tiempos modernos; he permitido que las tengáis a mano; y aún humanidad incrédula persistís en una ignorancia voluntaria; mi divino hijo solar Cristo dio la vida por explicaros en qué consistía esta vida eterna; que está fuera de la Tierra; mucho os habría enseñado mi divino hijo; pero le matasteis; truncasteis vuestras propias eternidades; más vale una criatura que no se haya manchado las manos con sangre inocente; que una, que sí se las manchó con sangre pecadora; y aun así, nadie debe mancharse las manos con sangre; porque mi divino mandamiento ordena no matar; la primera interpretación no corresponde para este mundo; es de un mundo más evolucionado que la Tierra; pero que aún está dentro de la imperfección; es solo un ejemplo para el conocimiento humano; mi divina bola de fuego depurador posee todas las potencias numéricas que vuestra mente pueda imaginar; mi divino fuego que todo lo arrasa es como vuestra microscópica mente; que bien sabéis es un fuego blanquecino que muchos hijos investigadores llaman fósforo mental; y no podía ser de otra manera; pues todo lo he creado; y todo lleva mi divina herencia; lo de arriba es igual a lo de abajo; en sus principios nacientes; los soles son fuegos mentales vivientes; como lo es vuestra mente; ellos poseen libre albedrío e individualidad como lo poseéis vosotros; lo de arriba es igual a lo de abajo; ellos también cumplen leyes; ellos dan luz a los mundos; entre otras infinitas obligaciones; y reciben órdenes del reino de los cielos; ellos flotan en el espacio como flotáis vosotros en vuestro microscópico planeta; lo que sucede en los lejanos soles, lo escribiremos en futuros planos; es una divina historia que no tiene fin; pues al empezar a contar la historia vivida por un sol, habría que empezar cuando fue un sol-bebé; es decir, espíritu-sol; empezando por sus primeros nacimientos o reencarnaciones; es lo mismo; en sus primeros pasos iniciales; cuando empezó siendo un microbio en un lejano mundo; un mundo que por su antigüedad, ya no está en el espacio; pues hasta los mundos poseen vejez; y mueren; tal como las criaturas; lo de arriba es igual a lo de abajo; los soles siempre han ejercido una fascinación en las criaturas de los planetas; se les confunde con el propio Creador; esto ha dado lugar más que otra cosa, al nacimiento de la adoración material; una adoración que tuvo sus épocas de gloria; fueron leyes que fueron pedidas por los espíritus de la antigüedad; se les hizo ver el atraso que esto traía; pero ellos insistieron; insistieron en conocer lo desconocido; insistieron en la causa de sus causas; en la causa de sus propios destinos; y todo les fue concedido; pedir en el reino de los cielos, tiene significado eterno para el que pide; pedir allí, es pedir conocer nuevas vidas; nuevos mundos; nuevas filosofías; nuevos cielos; nuevas leyes; es en otras palabras volver a nacer para acercarse más al reino de Dios; esto significa que los cielos son relativos; y sus criaturas que los habitan lo saben; y desean conquistar jerarquías más elevadas de cielos; saben estas criaturas, que lo más elevado que existe en el universo, es la morada del divino Padre; y saben que para acercarse a él, solo se logra por la sabiduría, por el conocimiento; por el trabajo; y no existe otra ley para ello; todo lo demás es vanidad propia de las pruebas y de sus imperfecciones; todo lo demás es ilusión momentánea; efímera; pertenece a los mundos; y se le llama mundano; pues se disfruta de ello, mientras se está en un planeta; toda gloria terrestre pasa al olvido; solo las doctrinas divinas son inmortales; ellas hacen cambiar el curso de la evolución misma; todos los planetas reciben la visita de la divinidad; pues la divinidad es responsable de sus creaciones; mi divino hijo primogénito fue y es un padre solar; no debe confundirse este término con el Padre Jehova; en todas partes hay padres de sus propias herencias; así en la Tierra están los padres terrenales; que no se confunden con el Padre Eterno; lo de arriba es igual a lo de abajo; el divino Padre es infinito; y los padres de la Tierra finitos; todo padre posee su filosofía; es como decir que todo padre terrenal tiene su propio pensar; sea cual sea su pensar, no deja de ser un padre; esto quiere decir que cada criatura es responsable de una herencia; es responsable de una reencarnación; pues al contraer matrimonio, se es responsable de hacer una sola carne; esta divina revelación estremecerá al gran mundo donde se ven las más grandes inmoralidades; donde por un puñado de oro, pisotean la divina ley del matrimonio; ¡Pobres de vosotros, escandalosos del amor! ¡Pobres de aquellos y aquellas, que por simple capricho probaron carne! ¡Más os valdría no haber nacido! Ninguno de vosotros demonios del escándalo, entraréis al reino de los cielos; os maldeciréis unos a otros; maldeciréis haberos conocido; de vosotros es el llorar y crujir de dientes, nadie os mandó escandalizar; libre albedrío tuvisteis; Divino Padre ¿Qué castigo les espera a los escandalosos del amor? Te lo diré hijito; tendrán que pagar segundo por segundo en el tiempo que duró el escándalo; más el tiempo de desdicha provocado en sus hijos; este tiempo se extiende por su influencia, hasta la tercera generación; por lo tanto, ricos del arte no podréis llevar el corderito de plata; símbolo de la inocencia; símbolo de la humildad espiritual; de verdad os digo, que ningún escandaloso lo llevará; pues ningún escandaloso será resucitado a niño de doce años; el año 2001; el que la hace la paga; ¿Cómo mis humildes hijos que son explotados por la ambición humana, no caen en estas violaciones? Vosotros que tenéis grandes fortunas y os jactáis de ello, no tendréis la ansiada eternidad; al polvo seguiréis; ¡Cómo maldeciréis el maldito dinero! Así lo pedisteis en el reino de los cielos; y así os fue concedido; libre albedrío tuvisteis en el pedido; así como en todos los pedidos humanos; nadie se queje; se os dio la vida para que ganarais en moralidad; y no en inmoralidad; por esto se os dio los divinos mandamientos; mandatos divinos para todos; pues todos pidieron probar la vida humana; aquí no hay excepción; como en la ley de la muerte, todos deben cumplir; entre los destinos de cada uno y los divinos mandamientos, está el Alfa y la Omega de todo destino; la vida humana fue escogida en libre albedrío por todos ustedes; nadie vino obligado a conocer esta clase de vida; todos fuisteis ilustrados en el reino de los cielos; todos visteis vuestras propias futuras dificultades; y todos prometisteis cumplirlo hasta el último suspiro; hasta el olvido del pasado, fue aprobado por vuestros libres albedríos; por lo tanto, el juicio final es parte también de vuestro reconocimiento; entrasteis en divina alianza con los divinos querubines de juicios finales; son las mismas divinas criaturas que os resucitarán en nueva carne; una carne que no es por engendramiento; es una carne salida del magnetismo solar; una carne que tiene divina alianza con la eternidad, carne inmortal; carne que corresponde al segundo nacimiento; al segundo tiempo; y al segundo cielo; mi divino hijo solar Cristo lo dijo: Soy la vida y soy la muerte; quiso decir: Puedo reemplazar vuestra carne mortal en carne inmortal; porque todo salió de mí; lo que es de mi Padre, es también del hijo; mi divino Padre está en mí, y yo en Él; mi Padre y yo, formamos una sola carne; un solo espíritu; un solo mandato viviente; mi Padre y yo, formamos el comunismo pensante de la trinidad suprema; todo eso y algo más, quiso deciros mi divino hijo en esa inmortal parábola; inmortal en el pasado; e inmortal en el presente y el futuro; pues las divinas escrituras, adquieren una nueva dimensión en el conocimiento humano; con la Ciencia del Cordero de Dios, se cierra el último capítulo en este microscópico planeta llamado Tierra; mi divino hijo, también quiso anunciaros esto; cuando él dijo: Soy el Alfa y la Omega; el principio y el fin; quiso deciros: Toda verdad la empiezo con doctrina, y la termino con doctrina; pues toda doctrina es palabra viviente, salida de mi divino Padre; un Dios viviente; por algo mi divino Padre dijo: Hágase la luz y la luz fue hecha; también palabras vivientes; por ellas nacieron los universos vivientes; y vosotros sois una de esas esencias vivientes; Sí hijos de la Tierra; muchas cosas quería mi divino hijo solar deciros; mas, vosotros le matasteis; no culpo a vosotros; sino a vuestros padres que fueron antes que vosotros; la culpa recae en quienes tramaron su muerte; y no en raza alguna; es el divino Padre quien juzga; y no los hombres; que ni cumplen con honradez, ni su propia justicia terrenal; justicia pasajera; hecha con cálculo demoníaco; pues a mis humildes hijos, no los toman en cuenta; pues no poseen dinero suficiente; de tal justicia no quedará piedra sobre piedra de su edificio; es decir, no quedará herencia alguna de ella; mi divino fuego depurador está en todos; pues poseéis inocencia; vuestro deber en la vida, fue haber mantenido incólume tal inocencia; sea cual fuere la doctrina que escogisteis por destino; conservar esta inocencia en medio de las tentaciones de la vida, es la suprema meta de vuestro espíritu; así lo prometisteis en el reino de los cielos; todo vuestro pensar es pesado en la divina justicia; ningún pensamiento de los que tuvisteis en la vida, queda fuera de esta divina justicia; así lo pedisteis también; y también pedisteis, que una parte de la divina justicia, se hiciera en la misma Tierra; es por eso; que muchos se castigan solos; otros se premian solos; son premios pendientes del pasado; lo que no se da en una existencia, se da en otra; si no se castiga una falta o no se paga una deuda en tal existencia, la ley se cumple en la otra; esa es la única razón de la infinita variedad de destinos que se ve en la Tierra; siempre ha sido así; desde el principio del mundo; incluso Adán y Eva también cumplieron esta ley; ellos tenían muchas leyes de destino pendientes; la caída en desobediencia por parte de ellos, no fue la primera; ni será la última; es todo un historial galáctico; que ahora por primera vez lo sabrá el mundo; solo di a conocer de Adán y Eva, lo que convenía saber de ellos; no debe olvidarse que la filosofía de la Tierra es filosofía de prueba; no le es dado saberlo todo; si lo supiera todo en el tiempo de prueba, esta filosofía pedida por los espíritus humanos, se desvirtuaría; hay muchos seres humanos que critican como el divino Padre hizo las cosas; y hasta se rebelan; son espíritus ignorantes; apegados a un presente y sus comodidades; quieren amoldar el universo, a sus caprichos; no saben estos espíritus de la ignorancia, que para que ellos estén viviendo, ocurrieron hechos inauditos; que hubo un colosal sacrificio de parte de las virtudes vivientes; que se movió y aún sigue moviéndose el universo; no saben estos espíritus ignorantes y mal agradecidos, que así como existen madres humanas, existen igual madres solares creadoras de espíritus; lo de arriba es igual a lo de abajo; cuando lo sepan y lo vean, se golpearán el pecho en medio de un llorar y crujir de dientes; todo lo creado tuvo un principio; y todo principio cuesta; nada es fácil en el universo; hay partos de vida en el cielo y partos de vida en la Tierra; tanto arriba como abajo; la ley de la creación es universal; para todos es igual; las variedades de destinos, se las crea cada cual; conciencia tiene de ello; en el viaje de retorno a la verdadera vida, que es la eterna, todo espíritu ve con asombro y vergüenza, que más allá de la vida humana existe una actividad abismante; una actividad que es entre mundo y mundo; entre sol y sol; y si es un espíritu ilustrado, ve y comprende emocionado la misión de mi divino hijo primogénito; allí comprende su divino mensaje, cuya doctrina se refería, a lo que sus ojos espirituales están viendo; la eternidad enseñada y anunciada por mi divino hijo, es mostrada por igual a todos; creyentes o no creyentes; el espíritu hace el viaje de retorno por el mismo camino que empleó, cuando reencarnó en un bebé humano; igual cosa ocurre con los espíritus primeros; con los espíritus que pidieron probar filosofía viviente en otras familias; y que vosotros llamáis animales; pues debo deciros que muchos de ellos fueron criaturas humanas en lejanos mundos; mas, no conocían la filosofía que están viviendo, en virtud de sus libres albedríos, pidieron y se les concedió; de todo hay en el rebaño del Señor; y ese todo no tiene límites; nada es imposible para el Creador de vuestras vidas, así como os creó a vosotros; así creó antes que vosotros, el universo expansivo pensante; negar su divina existencia, es negarse a sí mismo.-

Alfa y Omega.-